martes, 1 de abril de 2025

AR Rebelión 12: Amenazas

 

Una gran victoria para su bando. Una vez tomada la región se dieron la libertad de establecerse nuevamente en el que era el pequeño palacio de la zona para descansar como era bien merecido.

El único inconveniente que les había surgido, y para nada fue algo que tenían contemplado, fue la caída del Zodiacal Aries. Su habilidad era muy útil para llevar a cabo varias misiones. No era que extrañaran a Meng, pero ahora era la pequeña molestia de esperar por el despertar de otro Aries y ver que fuera de su bando, aunque el príncipe esperaba que para ese entonces la rebelión estuviera más controlada, sino es que acabada.

El anuncio por radio fue un movimiento hábil para desmoralizar al enemigo. Seguramente funcionaría.

Lo que no esperaban, fuera el mensaje esperanzador del maldito de Gunnar, anunciado precisamente el contratiempo que tuvieron, la muerte de Aries. Con algo de buena suerte de su lado, eso no sería suficiente para subirle el ánimo a los rebeldes que faltaban por liquidar.

Todavía a altas horas de la noche, seguía despierto tomando una copa de vino, encontrándose solo en la sala que era especial para la familia real. Merecía darse un momento de descanso.

Era por él que la rebelión había caído bastante. Y pronto estaba seguro en conseguir que todo volviera a la normalidad. Todo seguiría igual y con eso demostraría ser un rey digno de la corona.

Tomando lo que quedaba de su copa se dispone a levantarse para ir a su cuarto y dormir. A medio camino, uno de sus generales llama su atención.

 

Ranjit: príncipe.

¿?: *voltea a mirarlo* ¿qué sucede ahora?

Ranjit: hemos recibido buenas noticias de su hermano, Osmar.

¿?: *lo mira con atención*

Ranjit: han encontrado al nuevo Piscis. Un chico de 24. Esta de nuestro lado.

 

El príncipe sonríe complacido. Ese día parecía jugarles a favor. Lo necesitaban.

 

¿?: un hombre. Perfecto. Será mejor que la ramera de Valeria ¿cuál es su nombre y poder?

 

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La noche había sido terrible. El haber fracasado les habría quitado las ganas de dormir por más cansados que estuvieran.

Ahora parecía que todo sería incertidumbre para ellos… todavía más.

En cuanto dio la luz del sol se apuraron a juntar sus cosas para irse. No podían quedarse más tiempo, seria ponerse en peligro a ellos mismos y a la familia que les había abierto las puertas de su hogar.

Marcel seguía herido, pero al menos podía montar su caballo.

 

Se despidieron de las amables personas e iniciaron su viaje a Rosenea. Tendrian que hablar con Gunnar de lo que pasaría ahora.

Intentaron llegar lo más rápido posible. Siendo la noche el momento en que su recorrido habría terminado. Bajan de sus caballos y entran.

En su lugar de escondite parecía estar esperándolos el líder más grande. Esperaban que en esas horas que estuvieron incomunicados no hubiese pasado algo más, pero la mirada cansada de Gunnar parecía augurar algo.

 

Boris: *suspira pesadamente* ay no. Sí son más malas noticias, prefiero recibirlas ebrio. *camina a la cocina*

Liam: Boris, para con eso.

Marcel: ¿y ahora qué? No podemos tener tanta mala suerte como para incomunicados unas horas y ya llegué una nueva desgracia a nosotros.

Gunnar: Piscis fue encontrado… es un simpatizante de Ashwin.

Boris: *llega a la sala con un vaso de alcohol* …

Leroy: *suspira derrotado mientras se sienta en una silla* … ¿de qué sirvió entonces derrotar a un Zodiacal?... ahora de todos modos llego alguien a su remplazo… para ellos.

Liam: *se sienta en otra silla* … ¿Qué haremos ahora?... vendrán acá. El próximo ataque será a Rosenea.

Gunnar: sí. Es lo más probable…

 

El mayor mira un momento hacia los jóvenes para darles una sonrisa.

 

Gunnar: ¿cómo fue que mataron a Meng?... de todos modos, sigue siendo una victoria para nosotros digna de reconocimiento.

Liam: oh… use mis poderes en él. Sus poderes fallaron.

Leroy: y yo le corte el cuello a penas tuve la oportunidad.

Liam: ni siquiera sabía que yo tenía poderes o que estaba pasando.

Gunnar: eso puede ser una ventaja a nuestro favor… que podríamos intentar replicarlo. Al menos contra Qadira y Rinc.

Liam: *mira un momento a la mesa* … en parte por eso quería evitar el uso de mis poderes. Si tenía la oportunidad de estar frente a ellos, podría usarlos… pero ahora ya lo vieron. No saben tal vez como funciona, pero seguro esperarán algo de mi… y honestamente, ni se cual sería la afectación a los poderes de Qadira. Podría ser algo a favor de nosotros… o lo contrario.

Gunnar: entiendo… si se da la oportunidad, al menos usarlo contra Rinc. Es verdad, no sabemos de que forma se descontrolarían los poderes de Qadira… pero bueno. Es algo que podremos ir perfeccionando. Mientras pueden descansar.

 

Admiraban de alguna forma la capacidad de Gunnar de encontrar algo positivo a la situación y más aún el que ya parecía estar ideando su próximo movimiento. Tendrían tiempo en la mañana de platicarlo. Realmente sí necesitaban descansar.

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Esa noche al menos les había servido para poder recuperar un poco de su energía. Los ánimos por la mañana seguían algo bajos. Uno de los aliados de su causa se encontraba en la casa, revisando y atendiendo las heridas de Marcel. Mientras él era atendido, los otros 4 se encontraban en la sala del comedor, con algunos planos sobre la mesa. Intentando planificar sus siguientes movimientos. De vez en cuando distrayéndose con las noticias de la radio. Si bien estaban hartos de la voz de sus enemigos, era importante ver que tanto decían.

Claro, recalcar su victoria, que los querían muertos y ahora sumándole el que Piscis es un simpatizante a ellos como si fuera otra victoria.

Boris: muchos tomarán en cuenta el factor del nuevo zodiacal… podemos esperar que… tal vez haya algunos desertores de nuestra causa.

Liam: … lo mismo pensé yo…

Leroy: hm… pero todavía falta por encontrar el nuevo Sagitario, que aparezca… si tenemos algo de suerte, tal vez pueda estar de nuestro lado.

Boris: a este paso, en serio que seríamos muy afortunados si el Zodiacal de Sagitario nuevo sea un hombre valiente que nos apoye, ya muy poco probable.

Leroy: *lo mira* … Jenell estaba de nuestro lado. Tampoco era hombre.

Boris: claro, dos Zodiacales estaban de nuestro lado, ambas mujeres. Piscis y Sagitario… ¿Dónde están ellas ahora?

Leroy: ¿y la cabeza de Meng dónde está ahora?

Gunnar: basta. Basta…

El mayor había alzado un poco las manos en un gesto conciliador.

Liam: mejor volvamos a lo que estábamos… hasta no saber quién es Sagitario, no podemos contarlo como… *mira a Boris* una persona *vuelve a mirar al centro* a favor o en contra.

Gunnar: exacto… si bien Marcel ya está fuera de peligro, tal vez deba quedarse en la región hasta que esté más recuperado… *mira a Liam y Leroy* ustedes pueden ir a Monohu

Leroy: ¿Qué?...

Liam: ¿No sería mejor quedarnos?... ir preparando la gente que tenemos y organizar una defensiva para evitar que tomen Rosenea…

Boris: si perdemos Rosenea, lo mejor seria ir preparando nuestras mejores palabras de disculpas a ese maldito príncipe…

Gunnar: Monohu es la región más cercana que tenemos. Si parten hoy mismo, es probable que mañana a primera hora puedan estar de vuelta. Mi intención no es que vayan a perder el tiempo. Estoy consciente que si perdemos Rosenea, perdemos todo… *mira su mapa* todo se reduce a esto… la situación es complicada y nada a nuestro favor realmente… pero… al menos no hay que dejárselas fácil… *los vuelve a mirar* pedirlo por la radio puede ser riesgoso. Si ustedes van personalmente, pueden ir a buscar nuestro apoyo de allá y contarles la situación. Reuniremos a la gente que tenemos de Monohu y si se puede y hay, también de Canheun.

Los presentes se miran entre ellos antes mirar nuevamente hacia Gunnar. Más decisivos.

Liam: así se hará entonces… si daremos lo último, entonces que sea lo mejor…

Gunnar: *sonríe. Asiente con la cabeza* … *mira a Boris* contigo tal vez me debato un poco. Siento que tu habilidad es útil para que también los puedas llevar más rápido a Canheun.. pero igual podrías ser de ayuda acá… así que mejor dejaré que decidas eso.

Y Ahora todos miran hacia Boris.

Boris: … mi habilidad… *mira un momento hacia sus manos* no funciona tanto así… tendría que ir sin hacer mucho durante el viaje a Monohu y tal vez allá ya haya recargado lo suficiente para ir a Canheun… si somos pocos es más probable que funcione… aunque igual me da pesar imaginarlos a ustedes solos. Más si Marcel está herido.

Gunnar: no te preocupes n.n no solo somos él y yo. Igual tenemos gente acá. Nosotros claro que no nos quedamos sin hacer nada. Igual convocaremos a toda nuestra gente de aquí de Rosenea.

Boris: hmm… iré con los niños… tal vez así pueda garantizar que lleguemos más a tiempo…

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Tal como se había acordado, solo necesitaron una hora para prepararse y partir a su destino. No sabían cuanto tiempo tenían antes del próximo ataque, por lo que era mejor apurarse. Si tomaban descansos, era para que los caballos no sucumbieran ante el cansancio, pero incluso en esos momentos evaluaban en mapas e información las rutas seguras para pasar sin encontrarse con guardias o con riquillos simpatizantes del rey. Durante el inicio del viaje se decidió que la habilidad de Boris les ayudaría mejor a llegar más rápido, así tendrían más tiempo de platicar y formular nuestras estrategias con la gente que tenían en esas dos regiones. Después, al ser mucha más gente, tendrían que ir por su cuenta. El poder de Boris no podía abarcar a todo un ejército. De nada servía que lo guardara.

Una vez llegan, usan el mapa que Gunnar les dio, donde se encontrarían con el principal escondite de sus simpatizantes. Uno que el mismo Gunnar les había dado para esconderse.

Una vez llegan al lugar no necesitan mucho para comprobar su identidad y que se les deje pasar al escondite subterráneo que tenían. Quien era el portavoz de toda esa gente se reunió con ellos en la primera parte del escondite.

Leroy: ¿Qué quiere decir con que no nos apoyara?

Usa un claro tono de molestia contra la persona con la que platicaban, quien en ese momento baja la mirada, demostrando cierto arrepentimiento y culpa ante los líderes de su causa. Boris y Liam se quedan sin palabras por un momento, eso sin duda no estaba contemplado en sus planes…

¿?: en serio lo lamento, líderes… pero la gran mayoría ya habíamos acordado renunciar justo antes de que ustedes llegaran… Ya hemos perdido demasiado en esta rebelión que no nos ha llevado a ningún cambio. No podemos seguir dando vidas en vano para un cambio que simplemente no se está dando.

Pero conforme el muchacho habla, la expresión de Leroy va demostrando más su descontento

Leroy: se rinden entonces ¿Eso es lo que quieres decir?

¿?: … lo siento… ya no podemos ayudar más. Tampoco tenemos el corazón para entregarlos, pero… no tenemos más energía para seguir llevando esta situación.

Una vez termina de hablar, el coraje de Leroy lo hace levantarse bruscamente de su asiento, llamando la atención de los presentes. Se acerca con pasos firmes al portavoz. Su postura agresiva, todos pensaron que le daría algún golpe, pero se detiene a una distancia prudente del hombre. Su coraje igual evidente en su tono de voz.

Leroy: no se trata de esto. No pueden simplemente rendirse y volver a como todo estaba anteriormente. No pueden.

¿?: … con todo respeto, Leroy, pero sinceramente por sus estatus, ustedes tampoco tienen mucha idea del como vivíamos antes.

Más frustración reflejada en los ojos del chico, antes de que hablara, siente como alguien pone su mano delicadamente sobre su hombro, captando su atención. Al ver que Liam estaba a su lado decide irse a su lugar a sentarse, dejándolo ahora a él hablar.

Liam: no fuimos testigos en carne propia de todo lo que ustedes pasaron. Pero sí vivimos de cerca ante las injusticias con la que muchos de ustedes tenían que vivir… Tuvimos conocidos muy cercanos a los que perdimos por toda esta situación de desigualdad que viven día a día, pero tiene razón, tal vez para muchos de ustedes sigue sin ser suficiente… pero también confiaron en Eriad para que todo esto empezara.

Capta su atención.

Liam: estamos peleando a su lado. Y en primera fila sabemos todos los sacrificios y el desgaste de energía que ha conllevado toda esta guerra. Tal vez es demasiado pedirles más, pero finalmente, después de llegar tan lejos, ¿en serio así es como quieren acabar? ¿Demostrarle nuevamente a la realeza que pueden pasar sobre ustedes y que solo es cuestión de tiempo para doblegarlos?... ¿Eso vale los sacrificios que ya hicimos? Al menos demostremos que no se las dejaremos fáciles y que nuestro espíritu es cada vez más difícil de romper. Apostemos todo en esto, dejando un último mensaje.

Silencio. Nadie más se ánimo a agregar algo. Leroy no evita una sonrisa de orgullo por su amigo, Boris no sonríe, pero en su mirada se notaba satisfecho por las palabras de su compañero. Los presentes del otro grupo se quedan pensativos. Al menos esta vez ya no parecen tan firmes a la idea de renunciar a ayudarles.

¿?: … *sonríe* joven Galvared, tiene una habilidad increíble para el discurso, de la misma forma que Gunnar…

El muchacho mira hacia atrás hacia sus compañeros. Esta vez parecían estar divididos en vez de una decisión unánime. Después de analizar un momento sus rostros, su mirada se enfoca nuevamente en los líderes.

¿?: tengo entendido que irán ahora a Canheun.

Leroy: así es…

¿?: denos tiempo entonces. Vayan, de todos modos, tendrán que pasar nuevamente por acá y para ese entonces les daremos una respuesta… al menos, lo que puedo decir es que se puede hablar con sus palabras, y quienes quieran apoyarles irán con ustedes cuando regresen de Canheun.

Boris: (esa fue una mejor respuesta)

Liam: se los agradezco.

 

Se dan las correspondientes despedidas. Boris les señala que para más rápido y menos desgaste de su energía será mejor ir sin caballos a lo que Leroy y Liam acceden. avanzan caminando algunos tramos para luego ser apoyados con los sellos del mayor. Finalmente, van llegando a Canheun. Por el movimiento militar que la zona privilegiada les es necesario taparse un poco más con una capucha.

 

Leroy: … pudiste salvar la situación…

Liam: no nos dieron una respuesta definitiva.

Leroy: antes de que hablaras su respuesta era que no ayudarían. Que nadie de ellos ayudaría, pero después ahora tenemos la esperanza de que algunos quieran.

Liam: … veremos que tanto funciono cuando volvamos.

Boris: no te quites mérito, chico, Leroy tiene razón. Ese resultado fue mejor que nada.

Su platica se ve interrumpida por el sonido algunas personas marchando, normalmente eso lo hacían las personas del otro lado. Cambian su ruta para ir por una calle que se veía más pequeña, vacía. No conocían bien del todo, pero al menos podrían estar ahí hasta que las personas pasaran. Para mayor efectividad en pasar desapercibidos avanzan un poco más sobre está. Notando que los lleva a un pequeño callejón con muy poca iluminación. Leroy es el primer en llegar ahí, pero a penas pone un pie sobre la zona siente como alguien le sujeta del brazo listo para lanzarlo contra la pared. Se resiste, igual tomando la muñeca de la persona para evitar que lo lance, y ahora mejor intenta darles una patada a las costillas.

Liam pasa e intenta dirigirse a donde esta la pelea, nota que alguien se acerca a él para evitar que ayude a su compañero. A punto de tomar la iniciativa para tomar una pequeña navaja que tenía en su cinturón, siente como una cuerda se le enreda por su otra muñeca, la que tenía aún lastimada. La cuerda lo jala hacia el suelo y él no puede resistirse a causa del dolor punzante que le aparece. Su adversario se le acerca y cuando le quita la capucha lo mira directo a los ojos. De nuevo estos cambian de color

De las manos de la persona salen algunas esferas de energía que parecen pegarse a varios objetos del lugar. Algunas cosas parecen moverse solas. La cuerda que tenía atada sobre su muñeca ahora hacía movimientos serpentinos casi como si estuviera viva, le va soltando. No había notado en el momento que Boris había ido a auxiliar a Leroy.

Estando a punto de volverse una batalla más seria

¿?: ¡Alto! ¡Esperen!

Las miradas se posan en el recién llegado, quien mantiene su mirada fija en Liam al ser el único de sus compañeros con el rostro completamente expuesto.

¿?: Es- eres Liam Galvared.

La revelación hace que los adversarios se miren entre ellos. Dejan sus poderes y los sueltan, volviendo al lado del otro.

Boris: … vaya, normalmente cuando saben que es Liam, le quieren arrancar la cabeza del cuello.

Leroy: (es verdad…) *se anima a quitarse su capucha* hemos… venido a hablar con la resistencia del lugar ¿su portavoz está cerca?

¿?: je, ha, es una enorme casualidad.

Los otros proceden igualmente a quitarse lo que les cubría. Dejan sin palabras a los 3 líderes quiénes miran asombrados.

Liam: Eriad… Diarlond…

Eriad: yo vengo de hablar con ella.

Dice permanentemente con una sonrisa en el rostro.

Eriad: y parece que nuestras intenciones son similares, chicos.

No evitan pasear igual sus miradas con los acompañantes del rebelde. Claro que tenían que ser Fiel Acuario y Fiel Virgo.

Boris: (entonces- no huyo… no dejo la causa)

Leroy: (volvió…) *sonríe* (bien acompañado- esto… tenemos una oportunidad, de verdad la tenemos…)

Nydia: uff, bien, guapo, desde que estamos en el mismo equipo… ¿podrías hacer que tus ojos dejen de hacer lo que hacen con mis poderes?

Liam: ¿he?- ha, perdón.

Sus ojos vuelven al tono habitual, las cosas moviéndose solas se detienen solo por un momento, hasta que se empiezan a apilar cerca de la entrada del callejón.

Nydia: pueden ir avanzando, yo me encargo de quienes vengan por el ruidero que hicimos.

Lysander: no tardes. *mira hacia los demás* ustedes pueden seguirnos. Rápido.

Eriad: vamos, tenemos mucho de que hablar n.n fue oportuno encontrarlos acá.

Los dos hombres se dan vuelta y empiezan a dar algunos pasos. Leroy y Liam empiezan a seguirlos. En cuestión de segundos se escucha que efectivamente algunas personas empezaban a andar por el corredor.

Boris: *mira con una ceja alzada hacia Nydia antes de seguir a los demás* Virgo- con todo respeto, no deberías quedarte tú o al menos auxiliar a tu compañera.

No detiene sus pasos. Solo lo mira de reojo por unos segundos antes de volver su mirada al frente.

Lysander: Nydia lo tiene más que resuelto. Esos guardias caerán en minutos ante ella. Capaz y nos alcanza antes de que lleguemos al punto.

Siente la mirada juzgadora de Liam y Leroy, sobre todo del último, le hace desistir de hacerle más preguntas o de intentar que se quede ayudando a su compañera.

Boris: (sé que es una Fiel, pero… sigue siendo una chica…) *mira un momento hacia atrás antes de avanzar* (bueno, yo lo intente. Si igual perdemos a Acuario, queda en mi conciencia que no fue por mi)

 

Avanzaron por otro lado de la calle. Pareciese que ya conocían el camino y ellos solo los seguían de cerca. El Virgo más concentrado en que no pasaran más contratiempos, pero el Galvared y el Garé-Leon seguían impresionados de su presencia. Miraban insistentemente a Eriad, casi como si quisieran corroborar que no fuera producto de su imaginación.

Eriad: no estamos lejos n.n ya hablé con los de la zona y están dispuestos a cooperar igual. Se alegrarán mucho de verlos. Tenerlos aquí también a ustedes les subirá el ánimo.

Liam: … eso es muy afortunado… buenas noticias…

Leroy: … pensábamos que ya no volverías… perdimos Pridemi. Muchas vidas…

Esas palabras hacen que cambie radicalmente su expresión. Se le podía notar el arrepentimiento y la tristeza. Incluso sus orejas se habían agachado.

Eriad: lo sé… teníamos que coordinar algunas cosas para hacerlo mejor esta vez... yo-

Lysander: él quiso venir antes.

Finalmente se escucha la voz de Virgo, llamando la atención de los presentes.

Lysander: fuimos nosotros quienes pensábamos que todavía no era el momento.

Leroy: (hm…) … lo… importante es que ya están aquí.

Eriad: totalmente n.n

Siguen avanzando unos pasos más hasta que finalmente entran a una especie de zona abandonada. Al tocar una pared haciendo un ruido especifico todos los rebeldes van saliendo de sus escondites.

A su lado y de forma imprevista llega finalmente Acuario. Sin ningún rasguño y sin ninguna pizca de cansancio. Su traje, por el contrario, se encontraba levemente manchado de sangre.

Nydia: la guardia real últimamente contrata a quien sea, ni siquiera fue divertido.

Boris: (pero… ¿cómo?)

Ninette: hasta que llegan, estábamos a punto de salir a buscarlos… *mira a los otros líderes* oh… al menos veo que vuelven con compañía interesante.

Eriad: ya lo creo n.n vengan. Podemos ir organizando mejor nuestra próxima movida juntos. Es una suerte que estén aquí.

Boris: … en realidad tampoco es que podamos quedarnos mucho tiempo. Hemos dejado solos a unos compañeros y en general la zona de Rosenea sola…

Liam: es verdad… suponemos que Aloysius atacará pronto aprovechando su ventaja. Sabe que sumar a Rosenea le da una victoria inminente…

Ninette: ¿y sabiendo esos riesgos aún así vinieron?

Liam. Gunnar lo pidió así… era nuestra última movida.

Eriad: (oh… hm…) definitivamente, era, tiempo pasado. Ya no están solos. Iremos a Rosenea para no perderla igual… ahora con nosotros, llegar más en la mañana para apoyar no será problema.

Leroy: (eso espero… pero ahora todo pinta mejor sin duda alguna. Con ellos de nuestro lado… volvemos a tener una verdadera chance que ganar)

Liam: tendremos que hacer una parada por Monohu. Quedaron en darnos su respuesta cuando regresáramos para ver si se nos unían.

Eriad: *sonríe levemente* ten por seguro que lo harán…

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//Rosenea//

Esa noche se sentía especialmente inspirado. Ya había llenado una hora completa de su diario contando sus reflexiones y sus sentires de los últimos días. Hacia ya noches que no se había puesto a escribir tanto, a veces, incluso nada. Pero bajo la incertidumbre de lo que pasaría con ellos era buen momento para retomarlo, y mientras siguiera con vida, no dejarlo. Era algo que disfrutaba.

Posa su mirada un momento hacia un retrato que tenía a su lado y lo toma con cariño entre sus manos. La razón por la cual se había unido a esa causa con tanta dedicación. Una sonrisa melancólica aparece en su rostro. Los malditos Charberien ya le habían quitado todo.

¿Podía seguir perdiendo más?

A ese punto sabía que no, por eso apostaba mucho todo el tiempo, pero siempre manteniendo la cabeza fría para no cometer errores.

Recuerda los tiempos en que su hijo estaba ahí. Su única preocupación era seguir estudiando para mantener su beca, y poder seguir estudiando con sus amigos Leroy y Liam. Buenas épocas aquellas… que nunca volverían.

Su mirada deja de enfocar la foto en cuanto ve que un pequeño cuervo se posa por el marco de su ventana. Con solo verlo a los ojos, puede ver lo que ha visto el ave. Y eso le hace movilizarse.

Los cuervos que tiene disponibles los manda inmediatamente a avisarle a los cercanos que debían escapar de donde estaban. Él va a los cuartos que estaban ocupados para hacer el mismo aviso. Finalmente, llega al cuarto de Marcel quien se encontraba sentado, revisando sus heridas. Al entrar a su cuarto este lo mira.

 

Gunnar: nos han encontrado. Debemos irnos.

En su cara se refleja la sorpresa. Claro que era una posibilidad que habían contemplado, pero tener que vivirla era diferente. Deja en paz las vendas que ya tenía puestas y se levanta para agarrar su martillo, con algo de trabajo. Ambos empiezan a avanzar a la salida de la casa junto a los demás.

Marcel: Al menos los mocosos se fueron ¿Quién viene?

Gunnar: algunos soldados, tal vez un general, pero me preocupa más-

Antes que Gunnar pudiera seguir hablando, notan como la casa de enfrente se va agrietando completamente. Se va deshaciendo y la estructura va cayendo de abajo a arriba en cuestión de 1 minuto. Ese poder tan destructivo y temible.

Gunnar: Rinc…

Y sí, una vez disuelto el polvo, bajando por los escombros se encontraba cáncer. Mirándolos atentamente.

Rinc: me alegra que no me haya tomado mucho tiempo encontrarlos… ustedes dos. *señala a Gunnar y Marcel* son unas de las ratas que la golfa de Piscis defendió con tanto esmero… pero no todos. *mira a los lados* ¿Dónde están los demás?...

Marcel: no los vas a encontrar acá.

Rinc: bueno, eventualmente, sí serán encontrados y enjuiciados… pero a ustedes dos, ya les llego la hora.

Marcel da un fuerte golpe al suelo con su martillo, varias rocas salen del suelo. Ignorando su dolor golpea todas las que puede para mandarlas rápido hacia Rinc. Este no se mueve, simplemente alza la mano y en cuanto las rocas entran en contacto con esta se despedazan. Su poder le llevaba la ventaja al suyo, no había ni siquiera caso que intentara más.

Uno de los rebeldes sujeta a Gunnar y Marcel para jalarlos e intentar huir con ellos, desesperado, pero aún así sin querer dejar a sus líderes.

Una vez Rinc baja de los escombros solo pone las manos en el suelo, una grieta se va formando en un perímetro extenso, el suelo por donde estaban se va hundiendo y las casas se van destruyendo a su paso. El pequeño temblor que se forma de la tierra los detiene y pronto ven que ahora están atrapados por un gran muro que se formó.

Estaban atrapados con unas 4 personas más, dos de ellos intentando huir desesperadamente, escalando lo que podían del muro, arriba una persona extiende la mano buscando ayudar. Rinc solo toca con su codo la pared que está detrás suya sin dejar de verlos fijamente y una grieta atraviesa toda esa parte hasta llegar a donde estaban aquellos rebeldes que querían escapar provocando un pequeño derrumbe que los vuelve a situar donde estaban e incluso casi hacía que el de arriba cayera, resignado tuvo que huir dejándolos a su suerte.

Rinc: bueno, veo que esto será fácil, ¿no?

Y comienza a avanzar hacia ellos, como si fuera un depredador jugando con sus presas. Dos de los rebeldes quienes se mantenían firmes todavía se ponen delante de sus líderes y sin más opción corren a enfrentar a Cáncer, aunque la pelea ya tenía un claro ganador. Marcel tiene la intención de ir con ellos a pelear, pero Gunnar lo detiene.

Marcel: no tenemos de otra. Igual está herido, tal vez tengamos oportunidad-

Gunnar: así no. Herido o no es un peligro.

Marcel: tsh *mira a sus compañeros quienes ya habían empezado a pelear contra Rinc* moriremos. Pero moriremos peleando.

Gunnar: diles a los chicos que confió en ellos, jamás los culpe de lo que pasó… y gracias por todo. *le extiende su diario*

Marcel: *lo mira confundido mientras agarra el pequeño libro* ¿qué?

Gunnar saca de sus bolsillos 4 sellos que le habían sido dejados por Boris en caso de emergencia. Uno lo pone en Marcel y los otros los manda a sus otros compañeros que habían ido a pelear y el que restaba a uno de los que se habían quedado atrás en estado de shock. Los papeles por cuenta propia se dirigen a sus compañeros y se pegan a ellos.

Marcel: ¡ Gunnar, ESPERA-

Antes de que Marcel pudiera quitarse el papel para dárselo al mayor, desaparece junto a los demás. Rinc quien se estaba preparando para romperle el cuello a uno de sus atacantes de pronto se ve solo en esa pelea. Mira molesto hacia Gunnar.

Rinc: así que sí tenías un truco, de nuevo huir como ratas.

Gunnar: me quede yo.

Rinc: *cruza los brazos, molesto*

Ante el sollozo de la persona que se había quedado con él, Gunnar lo voltea a ver, sintiendo pena por él. De haber tenido más sellos… vuelve su mirada a Rinc.

Rinc: no importa, igual uno de los líderes caerá hoy… creo que de a poco se irá hundiendo la moral de los tuyos. *avanza a él* solo veremos de que forma hacer tu muerte algo ejemplar.

El mayor no hablo, simplemente tomo una postura más a la defensiva, tampoco es que se rendiría tan fácil así fuera el mismo Zodiacal de Cáncer, quienes muchos pensaban en él como el más peligroso de los zodiacales, su oponente.






jueves, 30 de enero de 2025

AR Rebelión 11: Confrontación.

 

Había pasado aproximadamente dos semanas desde su última victoria ante los rebeldes. Ahora parecía irles más a favor la situación. Luzmeria y Teravia las tenían bajo control nuevamente y Eriad ni su sequito se habían pronunciado ante ello. Varios pensaban que ya había renunciado ante sus estúpidas ideas de igualdad.

Vestido de ropa casual llega a una de las habitaciones a las cuales había sido llamado. Una de las salas de reunión, La puerta se encontraba ligeramente emparejada, a punto de abrir sin tocar la puerta logra distinguir dos voces de aquella habitación.

¿?: ¡Por favor!- Solo les estoy pidiendo que-

¿?: ¡Callate de una vez! ¡Y deja de meterte en asuntos de hombres!

La última voz más autoritaria. Parecía no dar lugar a ninguna replica y eso se notaba en un sollozo que comenzaba a sonar más fuerte. No tuvo que abrir la puerta. Al poco tiempo, una mujer es quien lo abre. No se anima a verlo y a pesar de que ella misma cubría su boca para callar su lamento, podía notar un moretón bastante visible en uno de sus ojos. No le dirige la palabra, solo se limite a irse rápidamente y él tampoco la detiene, solo entra a la habitación y cierra la puerta.

¿?: ¿Acaso fuiste tú?

Pregunta sin emoción, observa fijamente al otro hombre quien se encontraba más entretenido analizando la espada que tenía en sus manos que en su presencia. No era un tono de reclamo, solo de curiosidad.

¿?: no. Fue padre, pero lo entiendo. Me está volviendo loco con eso de rescatar a Heken.

¿?: *rueda los ojos, irritado* sigue con lo mismo, ¿Quién mando a Heken a ser un idiota y dejarse atrapar así de fácil?

¿?: da igual, debe entender por las buenas o por las malas que no arriesgaremos nada por salvar a ese idiota.

Deja de mirarlo fijamente. Va a sentarse a una de las sillas que había en el lugar.

¿?: me sorprende de hecho, madre siempre ha sido más sumisa ante padre y entendía cuando un no era no, todo esto de Heken la ha vuelto más insistente.

¿?: eso es lo menos que me inquieta.

Finalmente se anima a verlo. Suelta la espada, posándola a un lado de la mesa. Extiende un mapa que se encontraba enrollado a su lado.

¿?: todos ustedes subestimaron lo que les dije. Hasta padre. Les advertí que debían de terminar más pronto con todo este juego absurdo antes de que se prolongara más tiempo de forma innecesaria.

¿?: *mira con atención el mapa* tenemos de nuevo a Torunea, Teravia y Luzmeria. Los Empiure ya fueron amenazados con cerrar los portales si intervenían y al parecer eso ha hecho que tanto ellos como Eriad dejen de ser un problema. Los grandes señores de Celeradise, los que verdaderamente importan han jurado de nuevo su lealtad a nosotros, no entiendo a que-

¿?: *señala con una vara el mapa* Rosenea se resiste, al igual que Monohu y Canheun.

¿?: *mira con atención*

¿?: les advertí, puede que Eriad ya no sea un problema, que realmente, eso lo dudo… entre que vemos sí lo es o no, la realidad es que a raíz de todo esto y por no actuar bien ni dejarme ayudar con las planificaciones han surgido más idiotas que se creen con potencial de quitarnos nuestro lugar. *le extiende una hoja de papel*

¿?: *la toma* … ¿qué?... ¿Galvared y Garé-Leon?

¿?: fue lo mismo que pensé.

¿?: tsh… esos estúpidos moralistas…

¿?: de alguna forma ellos han sido suficientes para alimentar una esperanza con o sin Eriad. Podre exterminarlos claro, pero me habría gustado que todo esto ya tuviera un fin más pronto… *vuelve a señalar un punto en el mapa* mientras ellos cuidan esas zonas, iré a reclamar y acabar con la rebelión de Pridemi de una vez. Por más “importantes” ilusos que sean Galvared y Garé-León, no podrán proteger ahí también.

Antes de que el otro pudiera dar una palabra más alguien toca la puerta. Le dan el permiso para entrar y por esta aparece un hombre bien vestido con uniforme correspondiente.

¿?: príncipes, les informo que su padre, el rey Ashwin, está por llegar…

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La junta donde se platicaron los próximos movimientos no fue larga, ya tenían algunos días con su objetivo en mente por lo que solo tenían que organizar mejor el como sería todo. Al cabo de unas tres horas, los generales al mando ya tenían indicaciones y se preparaban para llevarlas a cabo.

En el cuarto más decente que tenía el patio donde se guardaba todo lo que necesitaban para las batallas se encontraba el príncipe mayor, terminando de ponerse la armadura especial que llevaría. Cuando abre la puerta nota que su padre estaba por tocar. Lo mira con un gesto de reproche que el ignora complementa. Le pasa por el lado para seguir avanzando, pero mantiene un paso lento para que su padre lo siguiera y pudieran hablar.

Ashwin: en serio irás entonces.

¿?: dije que lo haría, entonces lo haré.

Ashwin: deja que uno de los generales lidere. Para eso están finalmente, tú como príncipe heredero no tienes por qué arriesgarte. Son ellos los que tienen la responsabilidad de arriesgar la vida por nosotros.

¿?: sí, y por esas mismas palabras no me interpuse los primeros días de esta absurda rebelión. Tantas cosas se habrían evitado.

Ashwin: ya hiciste mucho organizando-

¿?: iré.

Ashwin: *suspira frustradamente* … ¿por qué piensas que Eriad no se ha rendido? No se ha tenido noticias de él en estas semanas. Seguro renuncio como el cobarde que es. Y los otros caerán en cuestión de días. Esto ya está resuelto.

¿?: sí Eriad ya renuncio, nos habrían devuelto a Haken. Sé que no es tu hijo preferido, pero eso habría sido una señal de olvidar todo esto y volver a como antes. Si lo mantienen cautivo es una señal. No sabemos sus próximas movidas, por eso es mejor acabar con los otros 4 antes de que se complique más todo esto y se unan definitivamente a Eriad. Al menos tenemos la ventaja de que todos creen él renuncio.

Ashwin: hm…

Varios soldados ya se encontraban movilizándose una vez llegaron al patio principal. El príncipe se acerco a su caballo.

¿?: lo que dije en la reunión también fue en serio. No digo que participes, pero encargale bien esa actividad a quien mejor la pueda llevar. Han pasado ya 2 semanas desde la muerte de esas dos rameras traicioneras… *mira hacia las estrellas* Debemos encontrar quién es Piscis. Y hacer lo mismo con Sagitario en cuanto se prendas las estrellas de nuevo. *mira a su padre* usarlos nos caería bien… también por “si las dudas”… intenta encontrar a esa anciana y a su hijo. Servirán de precaución.

Ashwin: sí, lo estuve pensando… sé quiénes podrán buscar.

¿?: *sube al caballo. Mira hacia algunas personas* tenemos la suerte de que Cáncer pudo mejorar en esta semana… *mira hacia su padre* no tardaremos en volver… y por cualquier cosa, mantén tu anillo cerca, tampoco sabemos bien la próxima movida de los Fiels traidores. *avanza*

El rey solo se limita a verlo mientras se aleja.

.

.

.

.

.

//en otra región de Celeradise//   [un día antes de la junta de los Charberien]

Toda una calle llena de escombros. Donde antes había casas ahora solo había ruinas. Unos chicos exploraban la zona, en búsqueda de algo que pudiera servirles. Entran a algunas casas destruidas a ver si encontraban algunos suministros. Revisan estantes o el suelo, finalmente, uno encuentra algunas latas de comida que no duda en guardar, revisando otro cajón encuentra algo de medicamento que igual se apura a guardar.

El llamado de su otro compañero le hace dejar lo que hacia para esconderse. A lo lejos se veían más guardias reales.

Usan uno de los escombros para esconderse, esperando que no quieran revisar justamente la casa donde se encontraban. No se animan a salir, los guardias se encontraban cada vez más cerca. Se alarman al notar que vigilaban bien la zona, volteando a los techos de las casas, detrás de las paredes, moviendo escombros. Una total inspección a detalle. Se abrazan conforme notan que uno de ellos se encuentra revisando la casa que estaba frente a la suya. El que venía al lado de dicho guardia empieza a avanzar a la suya. Contienen el aliento. Uno de ellos incluso cierra los ojos mientras el otro sigue observando, pensando en donde más pudiesen esconderse o sus probabilidades de huir vivos de ahí.

Pero todo fue tan repentino.

Una flecha impacta en la cabeza del guardia quien revisaba la casa de en frente. Esto lo nota su compañero quien decide volver a revisar a su compañero, no tarda en hacer sonar un silbato que alerta a los demás haciendo que se acerquen. Una nueva flecha le impacta ahora él, matándolo al instante. Los guardias recién llegados se disponen a disparar al techo de la casa donde provenían las flechas. Dos de ellos corren con intenciones de entrar a la casa por si el rebelde intentaba escapar. Las balas son respondidas con más flechas y otras balas. Fuego cruzado.

A punto de rodear la zona, uno de los soldados nota muy tarde como un artefacto silencioso va hacia ellos, termina en sus pies. Alerta muy tarde, pues pocos segundos después el artefacto explota.

Ambos chicos salen corriendo una vez esta más controlada la situación.

¿?: *sale de una de las casas. Va a revisar los cadáveres* (tan cerca…)

¿?: *se asoma por uno de los escombros* ha, te dije que iba a funcionar. *sale*

¿?: *mira hacia la casa donde habían ido los otros soldados a inspeccionar. Tiene el reflejo de ir rápidamente, pero sus pasos se detienen en seco*

¿?: *yendo a donde ellos junto a otros* ¿Eso es lo mejor que tienen esos soldados? *dice con una sonrisa en el rostro* mira que fue fácil matarlos.

¿?: ya sé :D

¿?: *cruza los brazos* no. No es lo mejor que tienen, claro que van a mandar lo peor a una zona que ya creen condenada.

¿?: *cruza los brazos* siempre tan-

¿?: te recuerdo que todo esto. *alza los brazos* fue provocado por Capricornio y Cáncer. No nos hemos enfrentado a lo mejor de su bando…

Silencio entre todos

¿?: … hm…

¿?: hm… menos mal… *pasa por el lado de ellos* porque, apuesto que cuando las cosas empeoren, huirás como el niño rico y miedoso que eres… justo como el otro.

¿?: hm- Marcel… *mira a su otro compañero* … *mira a Marcel* espera. *va con él al igual que los demás*

¿?: *respira profundamente* … *los mira avanzar* …

No se anima a responder, ni a seguirlos por ese momento. Se limita a acercarse a los guardias y revisar lo que tengan. Agarra algunas municiones, mapas y demás cosas que traían.

.

El día había acabado, afortunadamente no habían sucedido bajas de su lado lo cual eran increíbles noticias. Reunidos en uno de sus escondites tienen la oportunidad de relajarse un rato, al menos mientras no les tocara la guardia. Tampoco podía darse totalmente ese lujo de distraerse. Sin Eriad, eran la amenaza número 1 de la corona y no eran ingenuos, los recursos y la atención estaban principalmente sobre ellos. Lo bueno era, que mucha gente confiaba en ellos, en la causa que manejaban por lo cual no estaban solos. Varias personas les ofrecían su ayuda de forma genuina.

¿?: ¿A caso, siempre que los deje ir a los dos juntos me tocará escuchar reportes de que discutieron?

Hablo el mayor de todos, un poco acusatorio, más no enojado.

Marcel: bah, la gente exagera. No discutía con el riquitillo esta vez. Solo hicimos algunos comentarios inofensivos y eso fue todo.

¿?: (=.=U) tengo que darle la razón… *cruza los brazos* solo dije que esa “victoria” no era tan importante como la estaba manejando. Mientras no se pueda decir que vencimos a un escuadrón liderado por un Zodiacal y al Zodiacal en cuestión no es una victoria tan remarcable…

Marcel: y yo le dije que seguro cuando lleguen las importantes él estará oculto en su mansión.

¿?: ya veo… aún así. *se sirve algo de agua de un jarrón que se encontraba en la mesa* necesito que ese tipo de “diferencias” las tengan lo menos posible, la gente nos necesita ver bien y en sintonía. Debemos ser quien de el ejemplo… Tal vez sea cierto que no sea la gran victoria de victorias, pero hay que seguir motivándolos, que vamos por el buen camino.

¿?: *mira hacia la mesa* … entiendo…

¿?: y Marceel. Si ellos dos siguen luchando a nuestro lado a pesar de ya tener batallas difíciles debe de ser una señal de que sus sentimientos para con nuestra causa son genuinos.

Marcel: pff… Eriad también parecía tener sentimientos genuinos por nuestra causa y ¿Dónde está ahora? Lo salvaron, gente sacrifico su vida por él, ¿para qué? Para que saliera huyendo a Alesdria a esconderse y no volver más…

¿?: no podemos asegurar que el ya no está-

Marcel: por favor Riquitillo. 2 semanas han pasado desde que no se sabe nada de él. Supongo que vio la realidad y huyo-

¿?: haaa ¿ven a lo que me refiero? Basta, basta de todo esto.

Dice mientras lleva una de sus manos a su frente. Parecía que le estaba empezando a doler la cabeza. Los dos dejan a un lado lo que hablaban para mirarlo. Uno de ellos preocupado.

¿?: … *deja de mirarlo* … ¿Cómo le va a Leroy y Boris en Pridemi?...

¿?: … es más difícil sacar información desde que Wayna también se fue… pero… lo que he podido conseguir, a base aunque sea de rumores y lo que he visto/escuchado yo… *los mira* tal parece que están pensando en ir con generales de importancia más los zodiacales, pero no sabemos exactamente quienes…

Los dos se quedan más serios ante lo dicho.

¿?: … ¿Es verdad que cáncer se ha recuperado de sus heridas?

¿?: *suspira pesadamente. Asiente con la cabeza*

Marcel: los malditos de Rinc, Qadira, Joon y Meng… bueno, maldita sea.

.

.

//Pridemi//       [la mañana siguiente de la junta de los Charberien]

El tiempo avanzo, la noche estaba finalizando. A penas una tenue luz se iba asomando por el horizonte que reflejaba la llegada del sol.

Un grupo de soldados seguía su camino. Habrían elegido esa hora en especifico pues era lo suficientemente temprano para no levantar tantas sospechas al enemigo. Prestando atención, el mismo Zodiacal de Aries iba a cargo de ellos. Confiaban en sus reflejos para avisarles de cualquier cosa que pudiera frenarles el paso o ponerlos en peligro.

Se tenía estimado que la mitad del territorio hostil de Pridemi había sido tomado del bando del rey Ashwin, sin embargo, tenía pocos días que se les había informado que una nueva oleada de rebeldes se estaba resistiendo nuevamente y no dejaban que la toma total de Pridemi se diera. Todo eso por uno de los líderes que fue hace poco a ayudar.

Pasando por territorio seguro para ellos aún así mantenían su concentración al paisaje.

Su paseo tranquilo se vio perturbado cuando una espesa niebla les empezó a estorbar. No era común en esas épocas del año, por lo que solo había una respuesta. Todos los soldados se pusieron a la defensiva por ordenes de Aries quien bajo de su caballo. A sus pies repentinamente llegaban lo que parecían ser granadas. Previendo esa situación los soldados con material especial para estas se posicionaron sobre estas cubriéndolas con un ligero escudo que evitaría que la detonación fue letal para todo el grupo. La mayoría pudo detener la explosión, pero otras lograron su cometido, reduciendo un poco el número de soldados habilitados para pelear.

A los lados, aparecen los rebeldes quienes atacan a los guardias que parecían estar más desprevenidos.

Comienzan entonces los disparos de ambos bandos. Balas, flechas, algunos poderes, las bajas seguían en aumento. Uno de los rebeldes parece llamar más la atención, parecía ser quien lidera el movimiento a su vez que era quien más vidas cobraba de sus enemigos. El Zodiacal por su cuenta, también estaba eliminando a varios rebeldes, hasta que ambos se encontraron.

¿?: (Aries)

Meng: ¡oh! Déjame adivinar ¿Eres tú el famoso Garé-Leon que traiciono a su clase? Sí, esas orejas caídas y ojos morados… difícil de confundir.

El rebelde no responde. Avanza rápidamente a Meng con un sable en manos para intentar hacerle un corte mortal, pero este con sus poderes se quita donde estaba para aparecer atrás suyo, logra, de un movimiento, evitar una patada que le hubiese hecho caer de rodillas.

Meng: niño privilegiado. No estás hecho para la guerra.

Repone postura inicial. Sigue intentando hacerle daño con su espada. Al menos lo mantiene lo suficientemente distraído.

Sin aparecer, habiéndose mantenido en su lugar de escondite, apunta con su arma hacia Meng. Garé-Leon se deja dar un golpe que le derriba, con tal de hacer que Meng dejara de desaparecer. Eso parece funcionar, pues ahora este parece más entretenido en pisarle la muñeca para no dejarle retomar el arma.

Meng: tu y tus molestos campesinos acabaran ¿En verdad pensaban que así son rivales para los Zodiacales?

¿?: idiota.

Viendo la oportunidad, jala del gatillo para disparar… pero un golpe detrás suyo hace que el disparo se desvíe. No mata ni hiere de gravedad a Aries como era la intención.

Meng: *se sujeta el brazo* tsh.

¿?: ¡ (Boris)

Garé-Leon se repone de inmediato aprovechando el dolor de Meng para quitárselo de encima. Toma su sable con la rapidez que logra darle un corte por la pierna. Intenta de reojo ver a donde estaba su compañero, pero no puede distraerse tanto con eso teniendo a un zodiacal contra él.

Boris después de su disparo fallido voltea rápidamente con su arma para empezar a disparar a quien le haya hecho desviar su ataque inicial. Un escudo se prende para poder protegerse de los disparos, claro, tenía que ser un general de confianza de Ashwin. Avanza aún protegido por el campo, Boris no tiene más opción que ir a campo abierto, donde la batalla se estaba dando. El general no lo sigue, más se enfoca en ir hacia los otros tiradores que estaban atacando fuera del campo de batalla para ser él quien los eliminara.

Enfrentarse a alguien que tenía como poder el aparecer y desaparecer tan rápido a voluntad era difícil, más tomando en cuenta que no tenía poderes para contrarrestar eso, aún así, Garé-Leon era muy hábil con su sable y eso le había valido para herir un poco más a Meng pero el resultado no estaba siendo aún así favorable para él. Mira alrededor notando lo que pasaba. Por el momento todo estaba conforme al plan todavía. Seguía esquivando los ataques de Meng a pesar de ser difícil adivinarlos. Otra complejidad es que el maldito parecía sanar demasiado rápido, la herida que le había hecho la bala y él mismo con su sable ya no estaban tan visibles. Estando a punto de recibir un golpe certero en el rostro alguien logra darle un disparo por la pierna. Meng y él voltean para ver al responsable. El mismo Boris. Enojado por haber sido interrumpidos, va directamente hacia él mientras le lanza bolas de energía que a penas está siendo capaz de esquivar. Garé-Leon intenta seguirlos de cerca, pero unas cuantas mandadas hacia él lo atrasan.

Afortunadamente para ellos, la neblina vuelve una vez más, cubriéndolos de nuevo. Garé-Leon intenta seguir los rastros de luz que causaban la energía de Meng, quería llegar rápido para ayudar a Boris sí lo necesitaba.

Solo tenían que resistir un poco más antes de la retirada. Darles suficiente tiempo a los demás para irse de Pridemi. No tenía sentido pelear ahí si la mayoría del territorio ya les jugaba en contra.

La niebla estaba llegando en el momento oportuno para poder retirarse.

Un poco más.

Hasta que un comunicador sonó.

“Ranjit, Aries. Pueden dejar el escuadrón en el que están. Diríjanse inmediatamente al principal”

Suspira frustradamente al no tener más tiempo y oportunidad ahí para acabar con la vida del más problemático. Tuvo que ir hacia el general para ambos desaparecer. Ya no era necesario estar ahí.

Garé-Leon buscaba dentro de su campo de visión al Zodiacal pero no lo encontraba, a penas y había escuchado lo que le dijeron por comunicador ¿Era verdad que se habían marchado? Aún así seguía encargándose de los soldados de la realeza que llegaban a ir hacia el. La niebla por un momento se detuvo, eso no estaba dentro del plan. Miro alrededor notando que los guardias reales habían muerto en su mayoría. Algunos otros se habían rendido.

Parecía incluso que habían ganado aún sin buscar realmente eso.

Boris: ¡Lerooy! ¡Casi muero!

Voltea para ver al hombre correr hacia él. Al menos parecía estar bien e intacto, solo asustado.

Boris: primero ese hombre aterrador todo terreno y luego el zodiacal- mira que haber sobrevivido todo eso-

 Leroy: *le da unas palmadas a su hombro* me alegro que estés bien, pero esto… es raro. *mira hacia lo lejos en dirección de la entrada principal de Pridemi* … no deberíamos estar cantando victoria. No era nuestro objetivo…

Boris: … bueno, nuestro objetivo era evacuar nuestra gente de aquí. Con algo de suerte ya eso lo consiguieron.

Entonces el muchacho de ojos violetas casi palidece al instante. Mira alrededor casi desesperado.

Leroy: tenemos que ir con ellos ¡ahora!

Dice al mismo tiempo que empieza a correr hacia otro lado, intentando reagrupar en el camino a los de su escuadrón que todavía quedaban. Boris lo sigue tan rápido como puede, pero sin entender del todo.

Leroy: ¡Van con ellos!

Y entonces cobra sentido.

.

.

.

A penas habían podido llegar a tiempo para darles el anuncio de lo que se avecinaba. Si bien no querían perder del todo Pridemi, tener que pasar con cuidado por Torunea fue una advertencia de que iban a lidiar con más de lo que podían soportar en ese momento. Pridemi no era seguro de todos modos a diferencia de otros lugares donde todavía tenían más dominio por el momento. A penas llegaron con Leroy y Boris quienes eran los que estaban vigilando ahí platicaron de lo que vieron y llegaron a un nuevo plan.

Era mejor que todos aquellos que tuvieran voluntad de pelear todavía fueran por una mejor oportunidad donde todavía la había. De paso podrían mover a las personas que no quisieran caer ante la inminente entrada de los Charberien a ese lugar. El viaje les había tomado tiempo y evacuar a tantas personas nunca ha sido sencillo. Leroy y Boris irían a ganar tiempo, lo más que se pudiera con otros voluntarios. El enemigo debía de creer que estaban peleando con todo para que fuera creíble.

Pero que gran error.

A penas estaba en marcha su plan, de hecho se podía decir que estaban evacuando bien ya por la otra salida de Pridemi, pero fue ahí que todo empezó. La gente empezó a correr más deprisa, algunos empujando a la salida y todos regresando a Pridemi. Fue cuando una onda de energía bastante extensa y afilada impacta por la parte de arriba de las casas de algunas casas, cortando sin problemas y haciendo que los escombros cayeran.

Ese poder. Era Qadira.

Marcel y el otro líder estaban coordinando todo, intentando que fuera lo menos vistoso posible pero ahora todo se había arruinado. Tendrían que enfrentarlos.

Los habían tomado algo desprevenidos y eso lo sabían. Mientras algunos huían, otros se quedaban a pelear contra los soldados que había. Un número en contra muy desalentador. Ahora solo sería aguantar lo mejor posible para ver que alguno pudiera salir de ahí.

Mantuvieron la línea y respondieron como pudieron al ataque. Lo malo es que Leroy y Boris se habían llevado a buenos combatientes.

Un nuevo ataque a otra casa donde se veía más tumulto de gente, los escombros cayeron hacia los suyos y los soldados por igual, parecía que no les importaba. Usando su mazo especial Marcel se hacía camino entre los soldados, y entonces por un momento lo puede ser. Algo alejado, pero ahí estaba.

El primogénito de Ashwin. Ni siquiera se atrevía a acercarse a pelear tal cual. A su lado, escoltándolo estaban esa maldita de Qadira y Rinc… Qadira desde su posición arrojando ataques a donde le mandaba el príncipe. Y al desgraciado le estaba resultando bien.

Entre toda la gente que tuvo que aplastar, se cruza con su compañero.

¿?: este es el peor escenario posible. No hay forma de que consigamos repeler todo esto.

Marcel: ¡oh! ¡Entonces huiras! Suponía que-

¿?: ¡Callate! ¡Estoy aquí! Haciendo lo que puedo.

Marcel: (tsh- a este paso de todos modos todos caeremos)

Alguien se acerca a gran velocidad hacia ellos sujetando un arma blanca de largo alcance, Marcel logra interponer su martillo evitando el ataque y mandándolo más lejos. Al verlo mejor se notaba que era uno de los generales. Da un golpe al suelo con su martillo logrando levantar algunas piedras y pedazos de escombros y los golpea fuertemente para mandarlos a este. El general prende su escudo para evitar los ataques, pero lo pesados de los mismos no le dejan avanzar. Es Marcel quien camina directo a él mientras sigue haciendo lo mismo. Su compañero vela que nadie se interponga, Por un momento el escudo se torna de color rojo. En vez de usarlo, el general lo quita y se aparta de donde estaba recibiendo los escombros, para ahora atacar con el arma que tenía.

El color rojo de un escudo habría sido solo una señal que no paso desapercibida por el príncipe desde donde estaba. Enfoca su mirada a su general. A su lado ya habían llegado Meng y su otro amigo y general. Habiendo cumplido con su parte.

¿?: Así que ahí están los líderes…

Qadira: *lo mira* puedo ir yo y matarlos de una. O matarlos desde aquí. *mira hacia ellos* puedo buscar algún edificio lo bastante cerca para que los escombros los maten.

¿?: Mata al campesino, si gustas, pero al otro no. *mira a Meng* lastímalo un poco y tráelo ante mi. Seré yo quien lo ejecute.

Meng: *lo mira* (agh. Pero acabo de volver)

Rinc: ya oíste.

Meng: (tss… bueno, si no pude con uno, entonces con ese) *desaparece*

¿?: con dos de sus líderes muertos, más la caída definitiva de Pridemi, ni aunque el mismo Eriad vuelva recobrara el espíritu de las personas. *sonríe levemente* … la casa rosa con naranja. *señala*

Qadira: *mira la casa para luego mandar una onda a esta para cortarla*

.

.

Haciendo lo que podía, lograba que nadie interfiriera en la batalla que estaba teniendo Marcel contra el general. Con un fuerte y preciso golpe lo había mandado hasta la pared de una casa. Dejandolo muy malherido de seguro. Acercándose para terminar con el trabajo el ataque de Qadira derriba la parte de arriba de la casa cerca a ellos. El general, astutamente se cubre con su escudo.

Lo que ve es el escombro cayendo a Marcel.

¿?: 0.0 ¡Marcel!

Corre en su dirección. Pero antes de avanzar más alguien aparece frente suyo. Lo repentino de todo hace que no pueda quitarse de un buen golpe que le da el recién llegado al rostro. Se queja de dolor mientras lleva una mano a su nariz.

Meng: (supongo que su majestad querrá que se lo lleve más débil, para asegurar que no haga nada…)

Se acerca de nuevo al chico, este ahora se pone a la defensiva levantando su arma. Uno de los zodiacales había finalmente ido hacia ellos entonces. Sujeta mejor su espada para ir hacia este a intentar cortarle, su oponente desaparece y aparece a su lado para pegarle por las costillas. A penas y alcanza a esquivar, pero el otro de nuevo ya había desaparecido para aparecer a su otro lado, pegándole a la rodilla para hacerlo perder el equilibro. No cae, pero Aries le agarra la muñeca bruscamente para con un movimiento rompersela y hacerle soltar su espada, y sin una postura firme, finalmente cae de rodillas mientras suelta un quejido de color.

Meng: oh vaya. El otro dio más problemas. Sin duda se notaba que eras un rico inútil después de todo.

El otro lo mira a los ojos sin más intenciones de pelear. Para incertidumbre de Meng, sus ojos ámbar se vuelven de color cian.

Meng: (¿y eso?... hm- en fin. Ya puedo ir con el príncipe)

Al ver sus intenciones de sujetarlo por el cuello, se deja caer hacia atrás para alejarse y mejor levantarse de un movimiento. Meng fastidiado iba a seguirlo, pero sus reflejos le advirtieron de alguien más que corría hacia él con espada en mano, dispuesto a decapitarlo. Se quita rápidamente de ahí evitando tal cosa.

¿qué no había terminado su pelea con ese?

Meng: (¡lo que me faltaba el otro niño rico!)

Delante suyo el joven con el que se había enfrentado minutos antes. De nuevo haciendo el intento. Fastidiado quiere usar su poder para ir al lado de Galvared. Pero al momento de aparecer termina al lado contrario del que quería.

Meng: ¡ *voltea* (¿Qué?)

El joven Galvared aprovecha para darle un buen golpe en la cara con su mano sana. Que le hace caer de espaldas ante lo imprevisto. Viendo que recoge algo del suelo, vuelve a desaparecer… pero termina, de nuevo, en un punto que no quería.

Meng: (¡No puede ser! Fue él, ¡¿no es así?!)

Mira enfadado hacia Galvared. Notando que este ahora tenía una pistola, seguro fue lo que agarro del suelo, y le dispara. Esquivando los disparos, su costumbre le hace desaparecer nuevamente ante una bala que estaba por darle en la cara.

Lo malo es que aparece al lado de Garé-Leon, quien estaba listo con sabl en mano.

Sin mucha duda y con un ágil movimiento, lleva su sable al cuello de Aries, cortándolo.

Ambos se miran, respirando agitadamente ante toda la conmoción de lo que acababa de suceder. Lo que hicieron no paso desapercibido. Muchos habían visto. Uno de los soldados reales se acerca a ellos con algunos picos de hielo dispuesto a mandarlo, pero antes de avanzar más a ellos, un enorme martillo le da por la cabeza, matándolo al instante. Ambos voltean. Marcel seguía vivo, pero en un muy mal estado. Avanzan rápidamente a él, Galvared le ayuda a caminar mientras Garé-Leon ataca a quienes quisiesen ir contra ellos.

El chico de ojos purpura mira a lo lejos, Qadira estaba bajando de su caballo y parecía con intenciones de acercarse junto al otro general que antes había estado con Meng. No era que pudieran hacer mucho más, solo algunos pocos habían escapado antes de estar completamente rodeados y sin esperanza. Él había gastado su ultimo sello de teletransporte para llegar a tiempo a ayudar a sus compañeros más cercanos. Mira fijo a Qadira.

Siente que una persona lo toma del hombro, de reojo y casi en cámara lenta mira que algunos “papeles” van directo hacia sus compañeros y algunas otras personas de su lado.

Un destello de luz lo enceguece, pero cuando abre los ojos están en otro lugar. Mira alrededor. No más soldados reales ni escombros del campo de batalla, pero seguían cerca.

Boris: ¡Ahora sí! ¡esos fueron mis últimos sellos! ¡vámonos antes de que se les ocurra seguirnos o buscarnos que no estamos lejos!

Un poco pasmado es otra persona quien lo debe tomar del brazo para dirigirlo a su caballo. Mira atrás notando que más personas ayudan a Marcel.

Todos toman un caballo o su transporte más adecuado para empezar la retirada.

Boris había logrado salvar a muy pocos junto a ellos.

Y aún así tantas vidas se perdieron.

.

.

.

Tuvieron que dividirse en algunos grupos para evitar llamar la atención. Quienes habían sobrevivido por los sellos de Boris, se irían a la región más cercana de Celeradise, en ese momento era más seguro que los vieran sin ningún líder que los pudiera delatar como rebeldes.

En un punto intermedio, donde se veían algunas casas pobres, encontraron refugio con personas que simpatizaban con su causa. La casa era pequeña y se estaban hospedando todos en la sala. Marcel siendo el más herido, se encontraba acostado en el sillón, siendo atendido por la hija del matrimonio que les había ofrecido refugio.

Leroy y los otros dos se encontraban sentados en el comedor, mientras intentaba vendar su muñeca herida.

Boris: … Es un tanto cómico. Leroy y yo estábamos preparados para recibir daño físico por todo esto del plan… y ustedes salir ilesos por eso de la evacuación. Al final fue al revés. Ustedes dos heridos y nosotros más sanos.

¿?: … sí, gracias por recordarlo -n-U

Y desde la sala se escucha, claro que tenía que quejarse de eso.

Marcel: cállate, idiota. Significa que no peleaste.

Boris: ha y sin embargo estamos acá por mi. De no ser así, se habrían enfrentado a Qadira en estas fachas y déjame decirte: no habrías durado ni minutos contra ella… *suelta una risita* y eso que es una simple mujer… pero que miedo da…

Leroy: *rueda los ojos* solo callen…

Dice sin molestarse en mirar hacia ninguno de ellos. Más concentrado estaba en su amigo. Vendándole la nariz que igual parecía estar rota.

¿?: *suspira* y sí salí bastante mal herido…

Leroy: fue por ti que pudimos con Meng… además, con venda y todo, te ves bien.

¿?: ha je, ¿gracias?

Un carraspeo incomodo desde la sala. Ambos voltean a ver a Marcel quien les mira.

Marcel: o.ó … al menos podrían esperar a que este más recuperado antes de que empiecen con sus homosexualidades -.-U

¿?: ja, ja. Que gracioso.

La llegada a la sala de los señores de la casa les hace parar la discusión. La señora de la casa visiblemente afectada, mientras que el señor camina rápido hacia la radio. La hija los mira, parando por un momento de atender las heridas de Marcel.

Señor: e-esto lo estábamos escuchando- pero ustedes también necesitan oírlo.

Los nervios eran palpables. Los 2 líderes y Boris se acercan a escuchar lo que estaba pasando. En la radio se escuchaba la voz del príncipe heredero.

La caída de Pridemi ante nosotros es una muestra más de nuestro poder. Su causa esta perdida. Así como recuperamos esa región en solo cuestión de días tengan por seguro que será lo mismo en las otras. Que los sobrevivientes que pudieron escaparse como ratas les cuenten lo que fue enfrentarse a la justicia de la familia real.

La tensión va creciendo.

No tienen aliados fuertes. Alesdria, Maruelia y Endaief se mantendrán al margen de todo este problema. No tienen los recursos ni la gente para seguir solventando esto. Tanto así que ni su líder original está ahora para ayudarlos como había prometido. Eriad los ha dejado... Su patética lucha acabara pronto, por las buenas o malas. Si no quieren sufrir consecuencias más grandes, les invito a rendirse. Si lo hacen, les prometo que no tendrán represalias. Aun es tiempo… solo pido la cabeza de sus otros líderes inferiores. Incluso, quien tenga información de ellos tenga por seguro que será bien recompensando. Hablamos de Gunnar Veneoth, Marcel Jakal.

Los otros dos nombres siguientes parece escupirlos con más odio.

Leroy Garé-Leon, Liam Galvared.

Boris: … (gracias a las estrellas no me consideran uno de los líderes e.èU …)

Y Boris Bragfel,

Boris: *no evita pegarse en la frente*

Reflexionen bien mis palabras.

Y todo acaba ahí.

El silencio invade la sala. Todos con su mirada pensativa. Sabían que perderían Pridemi, pero no el costo de eso y menos como se estaban llevando las cosas.

Todo parecía jugarles en contra en ese momento.

Boris: *suspira* ¿“Líder”? yo era más bien su asistente principalmente para evitar esto y-

Liam: Boris… ahora no…

Boris: hm… *mira hacia la familia* necesito un trago, ¿tienen alcohol?

El matrimonio se mira y luego a Boris. La mujer asiente y va hacia una de las gavetas.

Señora: ¿alguien más?...

Leroy: … creo que a mi también me serviría…

Boris y Leroy van al comedor nuevamente para poder tomar del vaso de vino que les ofrecían. Liam se acerca, se sienta junto a ellos, pero no bebe nada.

Después de terminar de vendar finalmente a Marcel, la hija se levanta para cambiar de estación. Donde normalmente se llegaban a recibir noticias de como iba la rebelión, por un largo momento solo la estática los acompaño hasta que un mensaje empezó a resonar. Debido a los ánimos nadie estaba prestando atención más que ella. Marcel se había dormido.

Leroy: … se está perdiendo esto…

Liam: no debemos demostrar que nos afecta… debemos de mostrar algo de confianza al menos. Cuando lleguemos con Gunnar de seguro ya tendrá algo en mente.

Boris: de preferencia que sea algo para que nosotros dejemos de estar en la lista negra de esos desquiciados. *toma de un trago lo que tenía en su copa. Se sirve más* ese príncipe vaya que los odia.

Liam: a sus ojos somos una especie de traidores. No teníamos clase baja, entonces no necesitábamos esta rebelión… y aquí estamos, supongo que es por eso.

Boris: sí… verdad.

La más joven de la casa se acerca a ellos. Al principio le restan importancia.

R: ¿lo que dijo Gunnar es cierto?

Y ahí es cuando los 3 la miran.

R: ¿Leroy y Liam pudieron matar al Zodiacal de Aries?...

Liam: (¿Eso se puede saber tan rápido?... supongo que Gunnar está haciendo uso de sus poderes- pero wow…)

Boris: así es. Ellos pudieron.

R: *sonríe* … entonces, tal vez no todo este perdido… si ustedes pudieron… es buena señal.

Entonces Gunnar se las estaba manejando para mantener la esperanza con sus simpatizantes. Esperaban que fuera suficiente.


domingo, 11 de junio de 2023

Capítulo ***49: Sangre y apellido de importancia

 Cuánto tiempo con la historia original he? XD pero finalmente ha llegado el día de avanzar B0 para que no se les olvide tanto jajaja XD sin mucho que decir aquí arriba... proseguimos.










-.-.-.-Tiempo Belefiel//presente-.-.-.-.-

 

//Celeradise/Pridemi//

 

En el mejor hospital de toda la región de Pridemi todavía se encontraba descansando el rey Touma Diarlond, aunque afortunadamente parecía ser que su salud iba mejorando, todos insistían en que se quedará un poco más para confirmar que nada malo pasará.

Parte de la mejoría notable que tuvo el rey, se debía al Empiure curandero que habían mandado de Alesdria para velar a Touma. El Cadrite Museirax, el Empiure indeseado. No era un joven comunicativo, sólo lo atendía y se retiraba, no había convivencia con él e incluso era poco probable que respondiera a una platica que alguien quisiera entablar con él, varios trabajadores habían sido ignorados completamente por este. Angela lo podía tachar como un joven sin educación pues a ella quien era la reina también llegaba a ignorar. Sólo Tom era libre de ser ignorado por el chico, pero tampoco es que fuera muy comunicativo con él, sólo respondiendo a sus preguntas de forma cortante.

En la mañana le dejaron pasar un rato por los jardines del hospital para que pudiera distraerse, acompañado de su esposa y su antiguo cuñado. Después de esa hora de tranquilidad y aire fresco regreso a su habitación de hospital a tiempo para ser revisado por Adaleck.

Tom: *recostado completamente en la camilla*

Adaleck: *sus manos las tenía puestas a la altura del pecho de Tom, sin tocarlo. Mantenía los ojos cerrados para poder concentrarse más*

Angela: *mirando aquello* (hm…)

Orfeir: … ¿Ya está mucho mejor, verdad?

Silencio.

Angela: (hm, por algo no pregunte yo -.-U)

Orfeir: (n.ñUu…)

Tom: n.ñ … ¿Adaleck, todo va bien?

Adaleck: precisamente en este momento, te encuentras mejor.

Tom: eso es buena noticia n.n

Adaleck: pero por algunos resultados en tus estudios sí sería mejor esperar un poco más. Podrías recaer de nuevo. Además, todavía queda la Idriasis como opción.

 Tom: entiendo…

Adaleck: *quita sus manos* por esta parte del día, es todo.

Tom: claro, gracias.

Adaleck: *se levanta y se retira*

Angela: … que chico -.-U si no te hubiera ayudado a mejorar ya lo hubiera regresado a Alesdria.

Tom: calma n.ñ lo importante es que me ha ayudado.

Angela: hm.

Tom: entonces, ¿mis hijos ya regresaron? ¿los 4?

Orfeir: sí n.n todos bien, les fue bien en su misión.

Tom: perfecto n.n no les dijeron nada de esto como pedí… ¿verdad?

Orfeir: exacto… ellos no saben aún.

Tom: bien.

Angela: (no sé si después lleguen a sospechar…)

 

//Mientras en la recepción del hospital//

El tener en sus instalaciones al rey de Celeradise era una enorme responsabilidad para todo el personal. La reina misma había pedido que no se corrieran rumores ni que se esparciera la información sobre Touma siendo atendido ahí. Los trabajadores acataron bien la orden y no mencionaban palabra alguna de la situación. En determinado momento incluso habían tenido que negarles la atención a otras personas y canalizarlas a otro hospital igual de bueno. Claro, eso hacían solo con personas quienes no iban por algún tema de gravedad. Lo que sí es que el pasillo donde estaba la habitación de Tom estaba vacío. No había otro paciente por ahí cerca.

Enfermera: hm… ¿crees que sea algo malo lo que tenga?

Enfermero: bueno, hay una posible opción que quieren descartar… con la llegada del Empiure curandero será mejor, ha estado mejor desde que lo atiende. Podemos considerarlo una señal esperanzadora supongo.

Enfermera: sí…

El sonido de la puerta principal abriéndose les llama la atención Voltean a ver listos para analizar si era una persona que debía quedarse o si podían aconsejarle irse hacia otro hospital. Para nada esperaban ver a la persona quien entraba.

Guapo, de porte elegante. Bien vestido, con gafas de sol que ocultaban sus ojos. En una de sus manos destacaba un anillo negro muy bonito. Claro que sabían de quien se trataba. La enfermera intento ocultar una leve sonrisa.

¿?: *se acerca a ellos. Se quita los lentes* Buenas tardes. ¿El rey?

Enfermero: *dice el número de la habitación*

¿?: gracias. *camina hacia la puerta de entrada directo a las habitaciones. Lo dejan pasar*

Se vuelve a poner sus lentes obscuros como si de verdad los necesitara caminando por los pasillos. No eran del todo suficientes para ocultar quien era. Las personas en las sillas de los pasillos lo llegaban a reconocer. A quienes se le quedaban viendo insistentemente solo les daba una leve sonrisa y un saludo sin detenerse del todo. Llega al pasillo cerrado, sabe que es ahí. Pasa y busca la habitación que los enfermeros en la recepción le dieron. No es ni necesario buscar por número, mira que en las sillas del frente están unos Empiure. Los saludo con amabilidad y ellos le regresan el saludo. Toca la puerta.

Orfeir: *abre la puerta* ¿ *sonríe* Arturo.

No era ni más ni menos que uno de los nobles más importantes de Celeradise.

.

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-.-.-.-Tiempo Arefiel-.-.-.-.-

 

//Celeradise/Torunea//

Esa semana había sido una deprimente. A pesar de que el funeral se había realizado hace ya 3 días el ambiente se sentía pesado. Siempre era así con muertes importantes como esa.

A penas eran las 9 de la mañana, no era mucho de madrugar por lo que para él eso era temprano y aún así ahí estaba recostado en el techo del palacio de Celeradise viendo hacia las estrellas. Si por él fuera, estarían de regreso en Alesdria, pero entendía el protocolo. Debían de quedarse más tiempo por respeto. Tampoco era que le molestará estar en Celeradise. El paisaje siempre se le había hecho hermoso.

¿?: no se te vio en el funeral.

Levanta un poco la cabeza para ver quien le había hablado. Cerca de él se encontraba otra hechicera mirando al cielo, sentada. Su tono no había sido de reclamo, simple curiosidad.

Kefrén: detesto los funerales… *vuelve a acostarse* He estado en tantos a lo largo de mi vida que ya no… quiero…

Naunet: *lo mira de reojo un momento* hm… supongo que entiendo…

Kefrén: ¿Se noto mucho mi falta?

Naunet: bueno, mis padres, los Narek principalmente se dieron cuenta obviamente, de ahí en fuera los demás estaban ocupados en sus propios pensamientos.

Kefrén: entiendo…

Un pequeño rato de silencio mientras ambos admiraban el cielo estrellado.

Naunet: no has sido tan cercano a los Fiels, ni con estas del presente ni con la generación pasada…

Kefrén: … ¿para qué?... *se sienta, dándole la espalda* siempre terminan muriendo, y yo los termino perdiendo.

Naunet: …

Kefrén: Adara y Ademir fueron mis últimos funerales… *cierra los ojos* … yo pensé que ellos serían eternos, ¿sabes?... pensé que… tal vez los Inisfiel… *suspira* pero fue una ilusión. Los Fiel por más buenos que sean, mueren… ¿por qué soportar eso una vez más?

Se levanta para poder caminar hacia él. Una vez está a su lado se vuelve a sentar poniendo una mano en su hombro. El otro no se mueve.

Naunet: nos tenemos a nosotros… como compañeros Narek o Narashi. Nuestros amigos Empiure… no estarán solos jamás, no estarás solo.

Kefrén tiene el reflejo de mirarla. Le sonríe levemente, agradecido por esas palabras.

Kefrén: gracias… ¿Sabes?... siempre… incluso con la casi exterminación de los Narek… tuve la fortuna de tener a Neftis conmigo… no estuve solo realmente en ningún momento y luego los dos encontramos a los demás… *mira hacia el cielo* si hubiera sido lo contrario… realmente suena aterrador… un Narek solo…

Naunet: entiendo… *igual mira al cielo* … bueno, no pasaremos por eso.

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.

Debía ser fuerte. Sobrellevar la situación o no dejarse llevar por la misma mucho tiempo. Sus obligaciones no le permitían tanta calma ni en los momentos así. Los Catrises, Rasec y Narek le ayudaban bastante, sus Fiels igual.

A dos días del funeral de su madre había una situación que quería atender lo antes posible. Ese día camina por el jardín del palacio buscando a alguien. Lo encuentra sentado en el pasto, bajo la sombra de un árbol, mirando fijamente una flor mientras le arrancaba los pétalos. Se acerca más a él.

Kiona: hey…

Odven: … *no voltea a mirarla. Sigue en lo suyo*

Kiona: no habías estado mucho tiempo en Celeradise…

Odven: encontré… me sentí más cómodo en Endaief…

Kiona: ¿la chica?

Odven: *suelta un momento la flor para poder levantar la mirada hacia su hermana* ella es mi… *desvía un poco la mirada* … estamos saliendo y… bueno… quería… presentársela a nuestra madre y a ustedes…

Kiona: *se sienta en frente de él* de vista puedo decir que es una chica encantadora… si pudo hacer que la quisieras, me imagino que es una buena chica.

Odven: lo es…

Kiona: no hemos tenido tiempo de convivir… espero que eso cambie.

Odven: sí…

Kiona: ¿cómo se llama?

Odven: Daima… *vuelve a tomar la flor entre sus manos para mirarla* es una noble de Celeradise… solo que se mudaron a Endaief.

Kiona: oh… interesante ¿Quién le dio la nobleza?

Odven: Brandell Tavariet.

Kiona: así que de la familia Tavariet… *sonríe levemente* me da gusto por ti, hermano.

Odven: *la mira de nuevo. Sonríe levemente*

Kiona: me da gusto que hayas regresado a Celeradise n.n me puedes servir de mucha ayuda y-

Odven: vine de visita, pero… no para volver a vivir aquí.

Kiona: *lo mira confundida* …

Odven: … eso no quita que venga de visita muy seguido.

Kiona: … *vuelve a sonreír* eso me gustaría mucho…

Ambos se sonríen levemente. La reina se levanta, le extiende una mano a su hermano para ayudarle a pararse. Acepta la ayuda. Ambos caminan al palacio.

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.

//Alesdria//

 

Un templo sagrado, en un día como ese se encontraba con personas que necesitaban sentirse cercanas a los dioses que alguna vez estuvieron ahí. Los más creyentes decían que todavía seguían por ahí escuchando sus plegarias, algunos incluso pensaban que los Fiel eran demostración de que algunas divinidades seguían por ahí. Otros pensaban que los dioses no seguían más entre ellos, pero sí quedaba de su energía divina en algunas partes del mundo, criaturas y personas.

Todos en silencio, sentados en bancas especiales y en frente de ellos en una banca más especial se encontraban dos personas con una bonita túnica de colores brillantes. Ambos sobre sus rodillas, una mano extendida mientras el pulgar tocaba el puente de la nariz, pasando el resto de la mano en medio de sus ojos. Su otra mano envuelta en forma de puño sobre su corazón dejando que los dedos reposaran sobre este. La túnica los cubría todo, incluso su bonito cabello. Siguieron un rato más hasta que finalmente se levantaron todas las personas. Unas palabras más y el evento había finalmente terminado. Las dos personas de enfrente se dan un saludo especial para luego poder quitarse la túnica, dejando sus ropas normales.

Son los primeros en dirigirse a la salida, pero se quedan un buen rato más en esta para poder despedirse de quienes los habían acompañado. Son cordiales, respetuosos y tranquilos. Todos hablan bien de ellos. La ultima persona sale del lugar, llego el momento en que ellos también se pudieran retirar. La persona mayor pone una mano sobre su hombro y le dedica una sonrisa. Lo había hecho bien. El otro simplemente baja levemente la cabeza en un gesto amable. Se dedican algunas palabras antes de que se fueran cada uno por su lado. Sus amigos ya lo estaban esperando y una vez se encuentra solo con ellos, pone una mano sobre los hombros de uno de ellos.

¿?: al fiiin! Dioses, juro que me estaba quedando dormido otra vez =3=

¿?: ¿Tú? ¿Aburrido en una ceremonia religiosa que tienes que guiar con tu hermano? Que raro.

¿?: haaa que chico de veras XD y todos hablando maravillas del tan devoto hermano del Rasec Shakir.

¿?: ohh pero tampoco tan así. Finalmente sí cumplo bien mi deber u3ù no importa si me aburre, lo hago de todos modos.

¿?: eeso es muy cierto.

¿?: pero bueno. *los toma a ambos de las muñecas para avanzar* vamos. Salgamos. Hagamos algo interesante. Emocionante.

Los otros dos vuelven a sonreír y se dejan llevar. El chico los suelta para caminar a la par mientras hablan entre risas. Pasando un buen momento hasta que antes de llegar a su destino alguien lo llama.

¿?: ¿Joven Dleios?

Dleios: ¿hm? (oh- ay) ¿se le ofrece algo? n.n (¿en serio? ¿en mi momento libre? Que desgracia)

Sus dos amigos aguantan una leve sonrisa burlona mientras se alejan un poco conforme la mujer se acerca a su amigo. Desventajas de su posición.

¿?: lamento haberlo interrumpido en su momento libre.

Dleios: ha no se preocupe. Me imagino que es algo urgente… aunque de ser así, mi hermano podría encargarse mejor.

¿?: no… lo quería buscar personalmente a él… vera…

Se le nota de repente algo pensativa, preocupada incluso. Mira un poco alrededor como si de repente fuera vigilada. Eso le empieza a llamar la atención. Se acerca a ella sin decir mucho.

¿?: *suspira* (bueno, no es como si fuera algo que no se sepa…) … mi hijo… estoy preocupada por él y… bueno pensé que… es un Shakir igual a ustedes y… pensé que… usted… bueno… podría tomarlo como aprendiz… *lo mira* vine personalmente a pedírselo.

Dleios: (¿solo fue eso? Por su actitud parecía que había hecho algo ilegal) disculpe, no estoy tomando aprendices en este momento, pero Dletiov-

¿?: mi hijo tiene un Endiurek místico…

Se queda callado ante la nueva situación. Su sorpresa inicial vuelve y ahora las cosas parecen adquirir un nuevo sentido. Se queda pensativo.

¿?: sabe… *mira hacia el suelo* la maldición que suele rodear a las personas con Endiurek místico… y aunque los jóvenes Cadrites están siendo la excepción… tal vez sea porque ellos son diferentes… pero los demás que no gozan de sangre real… terminan mal… por favor… *junta sus manos* acepte a mi niño… dele las herramientas para sobrevivir…

Dleios: … hm… *suspira* …

A lo lejos sus amigos no hacen más que intrigarse por el cambio de comportamiento y gestos que había tenido su amigo. De algo irritado paso a estar más pensativo, serio… reflexionando.

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//En otro lado//

Yendo de árbol en árbol, esquivando ataque tras ataque. Se movía lo más rápido y hábil que podía. No lo hacía mal, de lo contrario su maestra ya le habría acestado al menos un golpe y por lo que veía no le estaba dejando ganar, ese no era su estilo. Lo que sí es que al principio los ataques que le mandaban eran más fáciles, pero conforme pasaba el tiempo es que fueron subiendo su dificultad. Llego el momento en que no solo debía esquivar sino atacar. Se recarga bien de una rama para impulsarse y acercarse rápidamente hacia ella intentando dar un golpe. Su maestra se quita antes de que esto fuera posible y casi logra darle un golpe a él por haberse acercado de esa forma tan brusca. Logrando quitarse haciéndose para atrás es que evita el golpe.

Siguen de esa forma cierto tiempo, habiendo cambiado ahora a un combate más físico. Tuvo la oportunidad cuando su maestra dejo un lado desprotegido y pudo ser capaz de darle una patada a un costado, sin embargo eso a propósito, pues su maestra aprovecho esa distracción para ella igual dar un golpe a una zona cercana a su cuello. Pudo sentir que había aligerado el golpe, de lo contrario habría tenía un resultado muy feo para él. Debía admitirlo, eso le había costado puntos. La distracción de sentirse torpe en ese momento le paso más factura cuando su maestra le pudo asestar más golpes. Por lo menos fue capaz de volver a darle uno a ella.

 

El agotamiento lo hace sentarse recargando la espalda en un árbol. Su maestra se acerca con una botella de agua que le pasa y él lo bebe sin dudar.

¿?: fue un buen entrenamiento. Avanzas muy bien.

Driak: sinceramente… me gustaría avanzar más…

Lo mira con curiosidad.

¿?: ¿hay algún motivo?

Se le nota un leve puchero que hace por mero reflejo. Para ser muy talentoso, seguía siendo muy joven. Era algo que a veces quedaba en el olvido. Mueve su cabeza a otro lado.

¿?: … ¿celoso del progreso de Lechuza?

Que el chico volteara inmediatamente a verla le hace ver que había acertado, de eso se trataba. Al verse atrapado simplemente suspira algo irritado. Bebe un poco más de agua para volver a apartar la mirada.

Driak: es muy bueno… siempre lo ha sido y ahora que parece va a poder entrenar un poco con Hariel… subirá de nivel de nuevo muy rápido… y yo me estoy quedando atrás…

¿?: es un sentimiento normal… pero intenta también ver tus logros, no sólo los de él. De esa forma nunca vas a ganar. Si acaso, úsalo para motivarte y seguir adelante. Si tienes la dedicación necesaria, no te quedarás tan atrás de Lechuza.

Driak: … je, ¿no debías más bien decir algo como “superarás a Lechuza”?

Su tono no era de reclamo, tenía cierto toque de gracia.

¿?: soy realista. Lechuza tiene un talento innato muy fuerte y está siendo bien encaminado desde joven. Que lo superes no es tan probable… pero tampoco imposible. Y eso dependerá de ti… de todos modos igual estás mostrando un talento sorprendente para tu edad.

Driak: *sonríe* gracias, maestra Irlena.

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//en otro lado//

 

Se encontraba sentado en la sala, dejando que su madre le revisara el moretón que tenía en la mejilla. La primera vez que su nimeri lo había visto con dicha marca casi paniquea, pero al menos al ver de cerca se notaba que no era nada para preocuparse. Se había levantado y tomado una pomada que le ponía con sumo cuidado en el área afectada.

Kalary: sée que por sus entrenamientos siempre están expuestos a este tipo de cosas… pero hacía tiempo que no volvías con un moretón así. ¿Alguna razón?

Al principio el chico desvía levemente la mirada sin mucha intención de responder. Hasta que mira hacia su madre nuevamente.

Yel: yo… es que debiste ver. *sonríe levemente* mi compañera Biery paso sin nada de dificultad los obstáculos, lo hizo tan fácil que yo quise intentarlo, pero… bueno nwnU falle… aunque fue casi al final.

Kalary: *sonríe levemente* veo que hay cierta admiración…

Yel: bueno… Biery es sorprendente X3 es muy buena en lo que hace… aunque pienso que su niperi sigue sin estar muy orgulloso de ella…

Kalary: ¿en serio?

Yel: sí… a veces Biery hace comentarios, y aunque parece que lo hace jugando, algo me hace sospechar que así es realmente…

Se queda un momento de silencio. A veces se le hacía absurdo pensar que el padre de Biery no estuviera orgulloso por sus logros y más bien siempre exigiera más y más. Biery era de los mejores en sus grupos… Mira un momento al suelo y junta sus manos. Si así era con Biery de buen nivel, entonces él…

Yel: … ¿estás decepcionada de mi?

Kalary: *lo mira con atención*

Yel: solo… me surgió la duda… con el entrenamiento que he tenido, a lo mejor el fallar esa prueba sí es muy… “patético…

Kalary: oh querido. *lo abraza* yo estoy orgullosa de ti y de tu primo. Siempre me fijo mucho en sus avances y siempre veo lo mucho que se esfuerzan.

Yel: *sonríe levemente mientras corresponde el abrazo* gracias, nimeri.

Kalary: no hay de que… entiendo que te surja la idea por el caso de tu amiga… el cual es lamentable… *lo va soltando* pero siempre recuerda que tú y Driak siempre podrán contar conmigo… los apoyaré y amaré en todo su camino hasta llegar a lo que están destinados ser. *le sonríe*

La sonrisa de su nimeri le transmitía mucha paz y amor. Era cálida… podía confiar en que sus palabras venían desde su corazón y eran honestas. Correspondió con la mejor sonrisa que tuvo y un agradecimiento igual de sincero.

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.

 

//Celeradise/Torunea//

Ese mismo día, en la noche después de haber convivido con su hermano y su novia.

Sentada en una de las sillas de su sala preferida en el palacio. La noche se encontraba especialmente silenciosa, cosa que le agradaba. Su vista se mantiene en una pequeña botella de vino especial. Le es inevitable quitar la etiqueta que la adornaba con sumo cuidado para después con la misma delicadeza pegarlo en una libreta que tenía a la mano. Se asegura que esté bien pegado antes de poder escribir en esa misma hoja.

Kion: imagine que te encontraría por aquí.

Kiona: *sonríe levemente* pues sí, me encontraste… *deja de escribir para mirarlo* ¿Cómo estás?

Kion: cansado, pero sin poder dormir todavía… *suspira* por veces todavía se siente como un sueño que mamá se haya ido para siempre… *se sienta en el sillón de al lado*

Kiona: lo sé… no puedo negar que me hará falta…

Kion: a todos… pero hoy fue un buen día. *la mira* je, ¿sigues con tu diario?

Kiona: *sonríe levemente mientras asiente con la cabeza. Sigue escribiendo* la novia de Odven me ha regalado algo… es un buen vino, si quieres puedes servirte. Igual ha traído algunas botanas, esas las escribiré luego.

Kion: Daima… se nota que es una chica agradable. Al menos ayudo a Odven a seguir otro camino.

Kiona: sí… es una lastima que mañana se regresen a Endaief.

Kion: mientras vuelvan estará bien… *mira el vino* oh, ¿no es uno que te regale alguna vez?

Kiona: je, pues. *ojea un poco su diario. Viendo las anotaciones de los regalos que le han hecho* hmm no, tú me regalaste otro. *le muestra la hoja con la etiqueta* ¿ves? Tu nombre anotado ahí.

Kion: je, bien, bien…

Agarra un vaso para poder servirse un poco de ese vino. Se quedan un tiempo más en la sala, en una pequeña platica que los envuelve. Con todo lo que estaba sucediendo, un tiempo entre hermanos como aquel les servía mucho para relajarse.

Lo necesitaban.

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-.-.-.-Tiempo Belefiel//presente-.-.-.-.-

 

//Celeradise/Torunea//

 

La noche había llegado.

En una sala del palacio que le habían dejado adaptar a lo que necesitaba se encontraba la gran hechicera Areci. Recostando en una cama improvisada se encontraba el chico que había sufrido por un fuerte hechizo para mantenerlo dormido.

Su meta más próxima había sido buscar algo con lo cual despertarlo lo más pronto posible, y aunque ya había visto un hechizo que serviría para aquello, no lo consideraba suficiente si eso resultaba en una semana y media. Afortunadamente, una solución le había llegado de una forma un tanto inesperada. En ese momento se encontraba leyendo para prepararse mientras se encontraba pensando lo que había pasado esa misma mañana.

 

 + - + Flash back + - +

En el cuarto que le habían cedido dentro del palacio para hospedarse se encontraba leyendo como hacía usualmente desde que llegaron. Se mantenía sumamente concentrada hasta que escucha que alguien tocaba a su puerta. Deja un poco su lectura.

Areci: adelante.

La puerta se abre entonces, dejando pasar a uno de los príncipes Diarlond, siendo más específicos, el mayor de ellos.

Smoke: (bueno-… ya estoy… aquí) hm- buenos días.

Areci: (¿Smoke?) buenos días… ¿sucedió algo?

Smoke: ¿hm? No realmente… ¿ya has… desayunado algo?

Areci: *se le hace curiosa la pregunta más no lo hace notar* no… no es algo que necesite.

Smoke: (agh- que idiota me estoy viendo en serio =//=U ¿Es lo mejor que se me puede ocurrir?...) entiendo… *mira los libros* ¿hm?... ¿todavía sigues investigando para despertar al chico?

Areci: *igual mira los libros* sí… he encontrado un hechizo, pero el tiempo para lograr despertarlo se me hace excesivo… sé que puedo encontrar uno mejor.

Smoke: (oh…) *sonríe levemente* muy decidida entonces.

Areci: *lo mira ante el comentario, notando su sonrisa* (¿hm?)

Smoke: *la quita rápido* aún así deberías descansar un poco… hmm… no es que yo sepa mucho de magia así que, aunque me gustaría, no sé como ayudarte.

Areci: … de todos modos, aprecio las intenciones. *sonríe levemente*

Smoke: (haa) *voltea levemente a otro lado* (hm) pero, aunque yo no sea hechicero o sepa de esos temas… capaz y lo mejor que puedo hacer es recomendarte a Unerid.

Areci: ¿hm? ¿Unerid?

Smoke: sí, seguro que ya escuchaste hablar de ella… es una hechicera muy buena también. *la mira de nuevo* tiene buen nivel, es la última Narek que queda… quien sabe, tal vez entre las dos encuentren una solución más rápida como te gustaría.

Areci: … (de hecho… es una buena idea…) es una buena recomendación… gracias.

Smoke: no hay de que… bueno, entonces la mandaré a llamar. Con Algo de suerte, podrá esta noche… en fin, me retiro entonces. Nos vemos luego. *se da la vuelta para caminar a la puerta*

Areci: … en serio, gracias, Smoke.

Smoke: *medio se detiene, pero sin animarse del todo a voltear* (haa…) no hay de que, en serio… sólo… descansa un poco… adiós. *sigue avanzando para irse.

+ - + Fin Flash Black + - +

 

No podía negar que la preocupación del príncipe le resultaba tierna de alguna forma. Se le hacía curioso su comportamiento. El siempre valiente y algo soberbio príncipe se comportaba de una forma un tanto diferente con ella, pero no le desagradaba.

Sus pensamientos se ven interrumpidos cuando de nuevo tocan la puerta en la que estaba. Al imaginarse quien era esta vez, se levanta mientras pide pasar a la persona recién llegada.

No había visto a un Narek en persona hasta ese momento, y eso era porque efectivamente no había otro más en ningún lado, pero de acuerdo con lo que había leído en sus características, la chica se adaptaba bien, concordando con lo leído. Lo más resaltable eran aquellas estrellas en sus mejillas.

Unerid: *la mira* ¿Areci?

Areci: sí… me imagino tú eres Unerid… al fin nos conocemos.

Unerid: sí, digo lo mismo. *entra bien. Cierra la puerta* El joven Smoke me comento de lo sucedido. Le interesa si puedo servir de ayuda en esto. *mira a Andrew* así que él fue el afectado.

Areci: sí, fue un hechizo bastante fuerte. *se acerca para ofrecerle un libro* ese es un contra hechizo que pude encontrar para quitarle el que tiene, pero tardaría en hacerlo.

Unerid: *lo toma para leerlo* … hmm… entiendo… (de hecho, sus hechizos son… difíciles para hechiceros comunes… sin duda ha de ser muy poderosa para saber manejar esta clase de magia) *de una mochila que llevaba saca ella un libro el cual con algo de magia lo abre en una pagina en especifica* yo tengo este. Vine algo preparada en cuanto Smoke me dijo un poco de la situación.

Areci: *se acerca para leer el hechizo* … es uno bastante bueno igual… aunque con sus contras… podríamos entonces sacar lo mejor de ambos.

Unerid: sí. Justo eso fue lo que pensé.

Areci: bien, hagámoslo entonces.

Cada una toma su respectivo libro y se ponen a los lados del chico dormido. Con magia lo mantienen abierto y empiezan a recitar.

Aunque Areci fuera superior, la Narek era digna representante de la magia de su apellido. Un símbolo apareció en la frente del chico con fuerza, pero conforme avanzaban en lo suyo, este se notaba que perdía poder al punto de romperse definitivamente. Es cuando ambas acaban.

Unerid: (bien…) listo…

Areci: finalmente… *mira a Unerid* gracias, por la ayuda.

Unerid: no fue nada… realmente fue Smoke quien me dijo y demás.

Areci: (en serio que su idea adelanto todo esto…) *se aguanta una leve sonrisa ante lo que pensaba* entiendo.

Unerid: ya había escuchado algo de ti… veo que es cierto eso de que eres una hechicera ejemplar del más alto nivel.

Areci: gracias… podría decir lo mismo. No había visto a otro Narek antes… pero de lo que he escuchado, demuestras que es cierto que eran hechiceros de nivel excepcional.

Unerid: gracias… *cruza sus brazos* sí… por ahora lamentablemente… no hay nadie más como yo. Con el apellido y la habilidad…(no despierto…)

Se arrepiente un poco de sus palabras al notar que la chica se pone algo pensativa. Antes de que pudieran decirse algo más, notan como el chico empieza a moverse con intenciones de despertar.

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Y hasta aquí ha finalizado este capitulo... sé que seguramente son muchos personajes nuevos, pero... son de mucha importancia :oU así que intenten no olvidarlos y si lo hacen preguntan jaja XD en si... hay igual muchas situaciones que son importantes de recordar juas juas... para que vayan viendo o tomando captura incluso- ok tampoco así jaja XD en fin... pues bueno. Espero que les haya gustado y que dejen su comentario o que al menos me digan sus pensamientos y teorias... 

Siendo así, hasta a ver cuando juas juas XD ... lo que sí, si quieren que siga al menos la historia del AR es necesario dejar su comentario muajaja ok ya pero sí jaja XD en fin... eso es todo por ahora ;) advierto que ya casi se vienen eventos algo... malos u3ù ;3